o ARTISTAS:
o KORAKRIT ARUNANONDCHAI
o PEDRO BARATEIRO
o EMMA CHARLES
o JUNE CRESPO
o GIRLISONFIRE (MONIKA JANULEVIČIŪTĖ + ANTANAS LUČIŪNAS)
o EVAN IFEKOYA
o TOMASZ KOWALSKI
o NICOLÁS LAMAS
o PAKUI HARDWARE
o JOANNA PIOTROWSKA
o M REME SILVESTRE
o SOFÍA REYES
o JAMES RICHARDS + LESLIE THORNTON
o CLEMENS VON WEDEMEYER.
o WEB DE LA EXPOSICIÓN: https://www.lacasaencendida.es/exposiciones/ahogarse-mar-datosdrowning-sea-data-9523
o TÍTULO DE LA EXPOSICIÓN: AHOGARSE EN UN MAR DE DATOS.
o COMISARIADO: JOAO LAIA
o GALERÍA O INSTITUCIÓN: LA CASA ENCENDIDA
o DIRECCIÓN: RONDA DE VALENCIA, 2, 28012 MADRID
o FECHAS: 1.02.2019 – 19.05.2019
Dentro de la filosofía de La Casa Encendida, y desde su departamento de exposiciones dirigido por Tania Pardo, entra el erigirse como lugar de vanguardia para la practica artística, de esta forma en sus salas se encuentran propuestas que se escapan a lo que se ve o se da en otras instituciones apostando por artistas, temáticas y formas de comisariar innovadoras.
Bajo el título Ahogarse en un mar de datos, se nos presenta una muestra comisariada por Joao Laia (http://curatorsintl.org/collaborators/joaeo_laia), escritor y comisario con un completo curriculum en el que cuenta con exposiciones comisariadas en el MMOMA (Moscú), MNAC (Lisboa), Contemporary Art Biennial Sesc_Videobrasil (São Paulo), entre otros lugares. Además de colaborar con revistas como Frieze, Spike Art Quarterly o Flash Art, también es el co-fundador de The Green Parrot, una instalación de proyectos de arte sin fines de lucro con base en Barcelona.
Para esta exposición que ocupa las salas B y C de La Casa Encendida de forma continuada va a jugar con el hecho de rebosar el espacio físico de la misma, se trata de una exposición dividida en tres partes complementarias: una exposición, un programa de performances (https://www.lacasaencendida.es/escenicas/drowning-sea-data-performances-9670) y un libro/catálogo. Estas tres partes van a girar en torno a una temática en común, la ansiedad del mundo actual, algo que ya se refleja desde el título, cómo los datos, la tecnología, nos ahogan y restan libertad sin ser muy conscientes de estar imbuidos en estas dinámicas. Así el propio comisario refiriéndose al propósito de este proyecto hablaba de cómo la sociedad ha cambiado mediante el uso de las tecnologías hasta convertirnos en esclavos de estos medios hechos para facilitarnos la vida, pero que han derivado en la creación de una ansiedad colectiva por la necesidad de conexión permanente con el otro ciborg.
"Han expandido una forma neoliberal del trabajo donde ya no hay una separación con el individuo. Siempre tenemos que estar activos, contestando a un email o un mensaje"
Joao Laia.
Se presentan diversas versiones de una realidad ficcionada en la que es difícil distinguir entre los elementos que provienen de la tecnología y los que vienen de la realidad, una realidad cada vez más tecnológica en la que se intercambian los elementos compitiendo entre sí.
“Ritual Without Belief”, Evan Ifekoya.
Al entrar en el espacio que conecta las salas en las que tiene lugar la exposición encontramos un video con un ensordecedor sonido en el que Pedro Barateiro, el artista, va a introducirnos a la temática de la exposición - The Opening Monologue (video) 2018 -. El texto escrito en forma de poema y la voz manipulada que inunda el espacio busca crear una experiencia completa para la compresión de la pieza que habla al público sobre las resistencias a las fuerzas colonizadoras del sonido, lenguaje y la imagen.
Partiendo de esta contextualización sobre la temática de la exposición, en la sala primera sala (B), se van a encontrar dos obras que remiten a las contraposiciones entre el pasado y el presente, y los usos de los medios naturales. Nicolás Lamas genera en su pieza diálogos y fricciones a través de la contraposición de elementos que intercambian energías e información a distintos niveles, genera así una serie de encuentros que varían según los significados asignados por el espectador. Esta temática de la incertibumbre se mantiene en piezas como los videos de Sofía Reyes en los que jugando con el montaje audiovisual plantea narraciones que generan analogías entre las catástrofes naturales a las que estamos asistiendo (cambio climático) y el cambio que se está produciendo a la hora de establecer relaciones personales y afectivas entre individuos.
Sobre esta línea se pueden leer las fotografías de la polaca Joanna Piotrowska – Enclosure– en las que se invita al visitante a pararse a pensar sobre la libertad del ser. Muestra habitáculos, jaulas, lugares donde algún ser animado ha habitado o va a habitar pero que se encuentran vacíos en ese momento. Esta libertad controlada habla al mismo tiempo del exceso de cuidados y de la hiper-sensibilización de la sociedad hacia la posibilidad de peligro o de daño por la incapacidad de reacción hacia esto. De estamanera Joao Laia crea un diálogo con la instalación de M Reme Silvestre que presenta una mesa de masaje que reposa sobre trece férulas dentales de descarga, reflexionando así sobre los niveles de cuidado a los que sometemos al cuerpo hoy en día usando para ello aplicaciones tecnológicas que controlan el propio cuerpo.
En la siguiente sala (C) seguimos encontrando una ingente cantidad de artistas que van a dialogar sobre el cuerpo, la tecnología y las relaciones que se establecen entre ellos.
Las obras de June Crespo invitan a iniciar una reflexión sobre la situación del cuerpo en el mundo actual. Por su parte las obras de Tomasz Kowalksi van a ser los puntos que hablen de forma más clara sobre la situación de ansiedad social producida por el mundo tecnológica, su lenguaje pictórico, realista ligado a las corrientes de expresionismo alemán, el arte marginal, el surrealismo o la psicodelia, ayuda a la comprensión del mensaje expositivo.
El recorrido concluye con la obra de Clemens von Wedemeyer - Transformation Scenario-, un video instalación en el que al espectador se le confronta con la posibilidad tecnológica de predecir sus comportamientos ante distintas situaciones, un punto final para una reflexión sobre el poder y control que ejerce la tecnología en la sociedad.
"Nao", June Crespo.
Cabe destacar cómo esta exposición se completa de forma sonora y luminosa de tal acompañando y ayudando al visitante a sumergirse en ese mar de datos, y a llegar a sentir esa ansiedad social de la que hablan los proyectos que aquí se presentan.
Pese a esto es un espacio complicado y nada fácil de leer. Desde el comienzo el visitante se encuentra con videos cuyo lenguaje requiere esfuerzo para su comprensión, además de tiempo para su visionado completo. Un recorrido que necesita de una visita calmada y reposada para detenerse en la lectura y en la experimentación de sonidos, luces y texturas, de tal forma que sumado a la disposición laberíntica del espacio, se tiende al abandono de la exposición sin terminar el recorrido propuesto por el comisario.
Es quizá una exposición algo pretenciosa y recargada en la que es necesario la experimentación detenida de los diferentes proyectos artísticos para poder obtener una lectura completa de qué es ese mar de datos en el que se ahoga la población. Pese a esto, y tras pasar alguna que otra hora en los espacios de La Casa Endendida, puedo decir que el mensaje, tras la experimentación, es completo, un proyecto conseguido en todos sus vértices, sin por ello ser fácil de comprender, de ahí mi duda ante si incluso tras detenerme en el estudio de la exposición he llegado a comprenderla, al menos en parte, o no.
MAITE DÁVILA.
En esta ocasión, tu crítica es muy correcta. Apuntas hacia la difícil comprensión de la muestra, a su carácter abstruso y un poco abrumador. Sin embargo, el método de ir obra por obra y artista por artista suele producir poco éxito crítico y literario, porque el lector queda también perplejo y confuso.
ResponderEliminarAntes de publicar, tienes que releer tu texto y evitar las numerosas erratas.